Reseña del libro "El abrigo de Jana"
POR ANA PUENTES
Hoy
Jana lleva puesto un abrigo gris y, mientras camina, piensa e imagina qué bien
se sentiría si fuese alguien diferente. ¡Sería tan maravilloso! Pero aún le
falta descubrir lo más increíble de todo…
En casa tenemos varios cuentos de
esos que consideramos “especiales”. Y sin duda, cuando recibimos “El abrigo de
Jana” de la mano de su ilustradora, éste pasó a formar parte de uno de esos
cuentos selectos.
A veces los adultos tendemos a
pensar o dar por hecho que las vidas de nuestros hijos e hijas son demasiado
sencillas y tranquilas. Sin embargo, en muchas ocasiones pasan por situaciones
que desestabilizan o incomodan su día a día: una palabra ofensiva o una actitud
desagradable por parte de algún amiguito o amiguita del cole u otra persona;
cambios de curso, de profesorado, de compañeros; dificultades en el hogar,
pérdida de algún ser querido o una mascota; la llegada a la pubertad…
Son tantas las situaciones que
pueden darse en sus vidas y que hacen que en ocasiones puedan sentirse
perdidos, sin saber muy bien quiénes son, dudando de sus decisiones y de sus
comportamientos, que se hace imprescindible educarles de forma que se les
proporcione una buena dosis de autoestima.
En “El abrigo de Jana” su autora,
Lola Ordóñez, psicóloga infantil, psicoterapeuta familiar y escritora de
cuentos, nos presenta a una niña insegura que se cobija bajo su abrigo gris
escondiéndose de todo y de todos, sobre todo de sí misma.
Jana está perdida en un mar de
dudas y, mientras camina, se detiene en varios elementos de la naturaleza
deseando ser cualquiera de ellos. Jana es capaz de observar la belleza, las
cualidades y atributos de todos ellos. Sin embargo es incapaz de reconocerse a
sí misma, anhela ser cualquier cosa salvo ella.
Pero son precisamente esos
elementos de la naturaleza los que darán a Jana las respuestas que estaba
buscando.
Una bella historia escrita por
Lola Ordóñez que, como ella misma dice, “…Mi experiencia como psicóloga me ha
permitido dedicarme a proyectos llenos de alma y corazón, donde las emociones
nos hablan y los conflictos se escuchan.”
Y es que, de la mano de Jana,
descubrimos sentimientos y dudas cotidianas con las que rápidamente uno se
siente identificado.
Un cuento que nos enseña el valor
de la autoestima, del reforzar valores como la confianza en las cualidades y
características propias de cada uno, de valorar el potencial que cada individuo
trae consigo como ser único.
La autora, además, nos regala una
guía para madres, padres y educadores, que se encuentra al final del cuento,
donde desarrolla los principios básicos de la autoestima, cómo fomentarla o
cómo ayudar a los más pequeños a mejorarla.
¿Y la ilustradora? Bueno, he de
reconocer que no voy a ser muy objetiva. Y es que desde que descubrí a una niña
del parche, Carmesina, se me ha caído la baba con cada una de las ilustraciones
que salen de la mano de Desiree Arancibia y le tengo un cariño especial en la
distancia.
Pero si he de destacar algo, diría
que puedo pasarme largos minutos mirando cada una de las imágenes del cuento
deleitándome en cómo ha sabido fusionar a la protagonista con el entorno. Una
fusión que habla por sí sola, sin necesidad de palabras. Jana transmite con sus
miradas, con su postura, con su expresión, con su risa o con la ausencia de la
misma.
El resultado final, os lo podéis
imaginar: un cuento tierno, sencillo y con mucha miga al mismo tiempo. Una
historia que emociona desde el principio y que, gracias al arte y maestría de
Lola y Desiree, cualquiera es capaz de identificarse con esa dulce niña y
llegar a darse cuenta de las veces que hemos salido a la calle con un abrigo
demasiado pesado.
Este mes de octubre, Librería Lea
lo dedica a Lola Ordóñez como escritora infantil del mes.
Para ello, el sábado 20, estaré
allí para hacer un cuentacuentos sobre este maravilloso cuento, además de una
manualidad relacionada.
¡Os esperamos!
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